La menstruación, es el proceso biológico y hormonal por el que todas las mujeres del planeta pasamos mes a mes. Nuestro ciclo, nos permite, principalmente gestar la vida, procrear y no necesariamente "procrear hijos"; en los momentos más creativos de nuestro ciclo nos permite crear ideas. Cuando cambiamos nuestra visión sobre la menstruación y sobre ese concepto que nos han vendido de que nuestra sangre es algo sucio, una enfermedad innecesaria de las mujeres, que por ello somos impuras... empezamos a entender y a comprender por ejemplo, y entre muchas otras cosas: cómo el patriarcado ha calado tan increinblemente en nuestras vidas haciendo que las mujeres nos desconozcamos a nosotras mismas y por lo tanto ellos, puedan controlar nuestras vidas.
¿Por qué no aceptas tú sangre? (Te invito a ver este vídeo que he preparado, para que veas cómo la sangre es rechazada y des-legitimada en nuestra sociedad).
Darle valía a ese concepto errado sobre la menstruación es apoyar el machismo, el patriarcado (y hoy el capitalismo) que por siglos ha reprimido a la mujer. Es difícil entender cómo las mismas mujeres negamos, maldecimos y peleamos contra nuestros ciclos; pero es comprensible, puesto que hemos vivido por mucho tiempo reprimidas, y enseñadas a que por "esos males" somos menos que los hombres y por lo tanto nunca ocuparemos el lugar de ellos. Y es que sí, nunca ocuparemos el lugar de ellos, porque simplemente, somos diferentes y tenemos un organismo diferente, no queriendo decir con ello que entonces porque es así, no tenemos derecho a ocupar los mismos lugares, por ejemplo en los trabajos que los hombres. Error también es pensar, que podremos obtener los mismos resultados o que podremos trabajar al ritmo de ellos. Sucede que ese es otro caso, en donde apoyamos de alguna forma el sistema patriarcal, negando que nosotras estamos en cambio constante y que no trabajaremos igual. A diferencia de los hombres, quienes son lineales, nuestro ritmo cada semana está cambiando: aveces, estamos más dispuestas a trabajar, otras veces queremos descansar...
El problema no es que no podamos trabajar, el problema es el sistema en el que vivimos que así como los hombres, es lineal. En nuestra sociedad, no se tiene en cuenta un trabajo para las mujeres que sea cíclico, no hay un trabajo en el que podamos desempeñarnos, de acuerdo al momento en el que estemos viviendo. El sistema económico en el que vivimos y en el que trabajamos es hecho para y por los hombres. Por lo tanto, si se quiere: Sí, nunca vamos a poder ocupar y obtener los mismos beneficios que obtienen los hombres.
Diana Faviánobá, realizó un documental llamado La luna en ti, en donde muestra los tabúes que existen al rededor de este tema, y nos muestra una forma diferente de ver nuestra menstruación.
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